San Agustín todo me lo da

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Quienes me conocen saben de mi delirio por San Agustín. Mi filiación con esa parroquia ya pasa de amor a primera vista a un amor eterno. "Lo que te falta es mudarte pa´ ese barrio", me decía un amigo cada vez que al preguntar ¿dónde estás?, yo respondía ¿dónde más?, en San Agustín.

San Agustín de Sur. Foto: Ramirez Carril
Soy caraqueña. De pequeña, cuando transitábamos la autopista Francisco Fajardo de Oeste a Este, justo frente a San Agustín, hacia las Residencias Hornos de Cal se hacía muchísima cola. Mi papá decía siempre lo mismo: "Esto por aquí es peligrosísimo". Crecimos con la idea de que "El Barrio", cualquiera que fuese, en cualquier lugar de la ciudad, no era un sitio para estar. Y pasar por San Agustín después de las 4 de la tarde, con el tráfico de muy lento a tranca´o era más o menos como acercarse a la muerte. No exagero. Tendría 10 años, lo creía verdaderamente.

Estudié todo el bachillerato en una parroquia colmada de barrios. Mis amigos vivían en el cerro. Todos. Quizá dos o tres habitaban en los bloques de la avenida y los llamaban "sifrinos". Tenía 12 o 13 años la primera vez que subí para hacer un trabajo en la casa de una amiga. Se llamaba Raquel, por cierto. Mi papá no supo, por supuesto. No me habría dejado ir. Agarramos un jeep hasta un emplanada y después caminamos dos o tres cuadras en vertical, literalmente. La chama vivía en la punta´el cerro. Mil ochocientos cincuenta y tres escalones, o más. Hice todo el recorrido mirando hacía el techo de las casas buscando a los pistoleros que en cualquier momento nos dispararían. Miedo. Sentía miedo. Era 1992. Justo el año del "Por ahora". Dirán algunos que no era descabellado que lo sintiera. Mucho tiempo después, recordé esas visitas a las casas de mis amigos en El Valle. Entonces hice conciencia del entorno, de la gente que habitaba esos cerros, de su generosidad ¡En esas casas siempre me servían comida! "¿Quiere juguito, mija?" Café, agua. Siempre.

A San Agustín nunca le tuve miedo. Demasiados afectos comunes con ese barrio. Siempre encontré gente con historias hermosas, extraordinarias, divertidas y osadas en San Agustín. Lo conocía de lejitos. En 2016, unos panas me invitaron a producir conciertos de agrupaciones cubanas en el Teatro Alameda, ese teatro de célebres historias, de luchas colectivas. Inaugurado en 1943, se convirtió en icono cultural de Caracas. Sobre su escenario se presentaron Benny Moré, La Sonora Matancera y Jorge Negrete. Pienso en todos ellos, en sus voces retumbando en las paredes del teatro. Tuvo que ser glorioso. Mi papá, melómano sin saberlo, disfrutaba en su picó a toda esa gente. Algunos domingos escuchabamos al "Charro Cantor" sin saber que ese señor venía a Caracas con frecuencia y que uno de sus lugares favoritos era San Agustín.

Emilio Mujica y Reinaldo Mijares. Compañeros. Amigos. Maestros. Foto: Ramirez Carril

Durante la producción de aquellos conciertos en 2016, me reencontré con Reinaldo. Y al año siguiente hice el Cumbe Tours con mis papás. Recorrer esa comunidad, libremente, con mis padres sextagenarios es de mis mayores tesoros. Barrio adentro, mi padre recordó historias de su infancia ligadas a San Agustín. Tenía un tío abuelo, Eduardo Palacios, que visitaba en Marín a una amiga suya, "una bruja" que le ayudaba con sus negocios. En medio de aquella fiesta callejera guiada por los parranderos, mi padre, que no es bebedor, se empinaba felizmente la botella de cocuy y ya no sentía miedo. El barrio había dejado de ser una amenaza.

Parranderos del "Cumbe Tours" guían a los visitantes por todo el barrio. Foto: Ramirez Carril

San Agustín es una de las 22 parroquias de Caracas y se ubica dentro del Municipio Libertador. Tiene cerca de cincuenta mil habitantes y se divide por el Río Guaire en dos zonas:

San Agustín del Norte, donde se encuentran el Complejo Residencial Parque Central, el Teatro Teresa Carreño y la red de museos de bellas artes, ciencia, arquitectura y diseño incluida la Galería de Arte Nacional.

San Agustín del Sur, donde se asentaron las primeras barriadas de Caracas a finales del siglo XIX con pobladores provenientes de Barlovento y los Valles del Tuy (estado Miranda), de Nueva Esparta (costa este de Venezuela) e inmigrantes venidos de Portugal, España e Italia. 

Esa mezcla de gentilicios, con base fuerte en las tradiciones afrovenezolanas, en la idiosincrasia negra, y la música como pilar fundamental, son elementos poderosos en la construcción sociocultural de San Agustín. Los percusionistas venezolanos de mayor reconocimiento en el mundo son nacidos allí.

Carlos "Nené" Quintero, percusionista número 1 de Venezuela, durante su presentación en el Teatro Alameda. Foto: Félix Gerardi

Hace más de dos años dedico mis saberes a esa parroquia. Aprendo su historia, me nutro de su cultura, hago mías sus costumbres y es en sus esquinas, con sus rutinas, sus décimas, sus músicos, sus cantoras y bailadoras, donde entiendo cada vez más y mejor por qué escogí este camino creativo. No le temo al barrio porque todo lo bueno que tiene me lo ha dado. Y juntos batallamos pa´cambiar "lo malo".

Cuando Martín Mata grita al final de cada recorrido Cumbe Tours: "Cieeeeeen por cientoooo" y escucho a toda mi gente responder al unísono: "Saaaaaan Aguuuustín", me reconozco en un espacio de comunión, libertad y creación en donde el miedo perdió su lugar.

Equipo 100% San Agustín productores del Festival de Música Cumbe San Agustín 2019. Foto: Marian Marrero



Comentarios

  1. Escribes tan hermoso como tu voz de locutora. Me encantó. Te felicito.

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  2. Coño chama eres un ser súper especial fuera de serie, brillante hermosa. venezuela necesita..
    - no Venezuela no, el mundo requiere de gente como tú! Te adoro desde que te conocí, por tu pasión y honestidad! - y te sigo con la fuerza de la admiración y el respecto por lo que eres, una gran persona!

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    1. Lenin! Que bien me hace leerte amigo mio! Volveremos a producir proyectos juntos. Ya lo verás.

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  3. Hola. No conocía está faceta tuya ¡Felicidades! Estuvo entretenido el "paseo" por San Agustín, saludos. Gisela

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    1. Hey! Señora Chela! Que bueno! Cuando pasemos la cuarentena, los invataré a dar una vuelta por el Barrio. Los abrazo.

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  4. [6/4 13:29] Rebeca: Chamaaama me gusto mucho, yo creci tambien con ese miedo, me identifico exactamente con lo del barrio del valle me toco igual que tu subir a la punta hacer un trabajo, y se me hizo tarde casi de noche cuando baje para ir a charallave. Pero despues de grande y antes de casarme llegue a ir a san agustin del sur donde decian que era extemedamente peligroso, pero no me parecio, tan exageradamente peligroso, me parecio como en otros sitios que lo unico que hay que tener es cuidado y nada mas, y ser simpaticas con los malos😊 como era en otros sitios en mi barrio.
    Me encanto de verdad! Y solo leerlo me dan ganas de que cuando vaya me hagas un tour por san agustin!.
    Esa parte musical que me cuentas me transporta mucho a mi papa a mi familia que es salsera, y eso lo llevo en la sangre no lo puedo negar me gusta la salsa de esas que escuchan nuestris viejos , la de verdad.😊🤭
    Gracias Prima! Articulos asi le hacen recordad a uno quien eres..

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    1. Gracias a ti prima por leer y compartir tu experiencia. Por supuesto cuando vuelvas te llevaré a parrandear por el Barrio. Lo sueño! Te abrazo.

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